Los Odio a Todos

Malditos sean, imagínense esta escena:

Un tipo, con sueño intranquilo, se remueve bajo las cobijas. En algún lugar perdido de su inconsciente empieza a sonar su alarma interna, avisando que se acerca la hora de despertar. Poco a poco, esta alarma va ganando terreno hasta que el tipo, ya no del todo dormido, se empieza a malhumorar con el día, simplemente por el hecho de amanecer.

Abrí un ojo y descargue una mirada cargada de rencor al reloj. 6: 26 a. m. solo había dormido poco más de 6 horas. Despertarse temprano ya era algo bastante irritante y empeoraba pensando hacía donde me tendría que dirigir. No había manera de salvar ese hecho, aun siendo el más alegre de los optimistas.

1.- Iba a una clase a las 7.
2.- La profesora era pésima en su trabajo.

3.- No quería.

Me irritaba especialmente la número 3, siempre había tenido mucha influencia esa clase de argumento. Aun así, me prepare -tanto mental como físicamente- para afrontar lo que, de buenas a primeras, sería un mal día.

Una vez afuera, en el transporte público, el estrés gano definitivamente: Las calles cerradas por obras, cada vez más y más gente subía, y me retrasaba cada vez más. 

De vez en cuando me dan ataques de odio irracional al mundo, aunque desde mi punto de vista son totalmente fundamentadas. Pero empezar el día con sueño y gente hace que pierda fe en la jornada. En fin, llegue a la escuela, me apresure a subir las escaleras y encaminarme a mi salón. Me basto una ojeada rápida a las ventanas para que, inconsciente y en automático, empezaran a formularse en mi cabeza una variopinta selección de maldiciones, juramentos, tacos y blasfemias.

A escasos metros de la puerta, salió la primera del día [tengo mis dudas sobre aquello, normalmente insulto a quienes les toque compartir transporte conmigo, aún más a quien tenga la osadía de sentarse a mi lado]:

- Hija de Puta.

Confirme mis sospechas cuando gire el pomo de la puerta, la empujé y di una breve pero contundente miradita dentro: Nadie.

...

¿...?

¡¡¡...!!!

¡¿Me están jodiendo?! ¡¿Me levante a las 6:26 a.m. a lo vil pendejo, me perdí de dos horas más de sueño por nada?!

No hay maldiciones en entico, elfico o en lenguas humanas para describir tal atrocidad.

 Perdí mi esperanza en la humanidad desde hace muchísimo tiempo, pero esto le agrega unos -10 000 puntos. Si tuviera superpoderes ese hubiera sido el momento cumbre en que me pasaría a la villanía, al lado oscuro y todos, hombres, mujeres y niños; hubieran sucumbido ante la ira de un Dios furioso. Mandaría tormentos 7 veces peores que las plagas de Egipto. Vomitaría fuego sobre sus cabezas, me daría un festín con los cuerpos y almas de sus seres queridos, haría que ellos mismos se unieran al banquete devorando la carne de quien más amaron. Les hubiera dado una eternidad de hemorroides y que escucharan la mierda de Bieber, reggaetón y cumbias. Y les castigaría a que vieran una y otra y otra vez "La Rosa de Guadalupe" y sus pésimas actuaciones. Todo mundo desesperaría y se inclinarían con respeto y temor ante Mí, mientras observo y me burlo de su sufrimiento en mi trono bajo un cielo rojo en el que vuelan gárgolas y demonios llevando a todos los rincones del mundo mi mensaje de venganza.

Si, lo admito, me enojo solo un poquito. No es para menos, imagino que muchos me entenderán. He tomado la decisión de no ir a la próxima clase, se va a levantar temprano su puta madre.


Eso es todo por ahora, en mi próxima entrada creo que hablare de la pendejez de la gente. Solo necesito que se acumulen sus idioteces. Exacto, la espera no será larga.