Me la pelan, cerdos malignos de cuarta categoría. Acabo de estudiar y me siento todo un Dios. ¿Aún tienes la vagina mojada por que vino Ratzinger? Pues que idiota, me deberías estar idolatrando a mi, el ser superior definitivo.
Comprendo tu pequeña mente, como cuando te pones analizar las motivaciones de una hormiga. Para mi eres insignificante, una pelusa molesta comparada con mi gran sapiencia. Tu mente pajera está repleta de tetas, vaginas y reggaetón, mientras que la mía resuelve los problemas de filosofía, sociología, psicología y mevalemadrología.
Es más, en base a mi obvia superioridad por sobre todo lo que habita esta tierra (y ya que el mundo necesita un Dios después de la Caída de Chuck al felicitar a Bieber) Yo seré tu nuevo Dios, puedes empezar a alabarme, hacer sacrificios humanos, rezarme desde ya. Y si considero que tu problema es lo suficientemente interesante como para que deje de divertirme viéndote sufrir, te daré una palmadita en el hombro para que continúes.
Deberás rezarme y hacer sacrificios de vírgenes para que me pueda divertir. Mi templo debe ser una pirámide como la del templo mayor de Tenochitlán y en mis misas el sacerdote debe comer una oreo tamaño ostia.
Tú no eliges a mi religión, mi religión te elige a ti. Cuando las energías cósmicas que gobierno te consideren lo suficientemente listo para soportar el camino de la verdadera fe entonces soñaras con súcubos complaciendo todos tus deseos y cuando despiertes las encontraras acostadas a tu lado, es una muestra de generosidad que le doy a mis fieles con mi inmenso poder.
Los beneficios de la verdadera fe:
1.- Si me alabas tu pene crece cinco centímetros por rezo. Si eres mujer tus pechos crecerán y en lugar de periodo te saldrá dinero de la vagina cada 28 días.
2.- Empezaras a tener el cuerpo que deseas. Si, también el de ella/el.
3.- Las chicas mortales no comprenden mi superioridad así que le parecerás sexualmente atractivo y se mojaran al verte. O los hombres dejaran de ser penes andantes y te respetaran.
Alábame o muere. Soy tu Dios.
Es más, en base a mi obvia superioridad por sobre todo lo que habita esta tierra (y ya que el mundo necesita un Dios después de la Caída de Chuck al felicitar a Bieber) Yo seré tu nuevo Dios, puedes empezar a alabarme, hacer sacrificios humanos, rezarme desde ya. Y si considero que tu problema es lo suficientemente interesante como para que deje de divertirme viéndote sufrir, te daré una palmadita en el hombro para que continúes.
Deberás rezarme y hacer sacrificios de vírgenes para que me pueda divertir. Mi templo debe ser una pirámide como la del templo mayor de Tenochitlán y en mis misas el sacerdote debe comer una oreo tamaño ostia.
Tú no eliges a mi religión, mi religión te elige a ti. Cuando las energías cósmicas que gobierno te consideren lo suficientemente listo para soportar el camino de la verdadera fe entonces soñaras con súcubos complaciendo todos tus deseos y cuando despiertes las encontraras acostadas a tu lado, es una muestra de generosidad que le doy a mis fieles con mi inmenso poder.
Los beneficios de la verdadera fe:
1.- Si me alabas tu pene crece cinco centímetros por rezo. Si eres mujer tus pechos crecerán y en lugar de periodo te saldrá dinero de la vagina cada 28 días.
2.- Empezaras a tener el cuerpo que deseas. Si, también el de ella/el.
3.- Las chicas mortales no comprenden mi superioridad así que le parecerás sexualmente atractivo y se mojaran al verte. O los hombres dejaran de ser penes andantes y te respetaran.
Alábame o muere. Soy tu Dios.
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