Por mi se va a la raza condenada. Antes de mi no hubo nada exepto lo inmortal y yo duro eternamente

Por mi se va a la raza condenada. Antes de mi no hubo nada exepto lo inmortal y yo duro eternamente
¡Oh, vosotros los que entrais, abandonad toda esperanza!

domingo, 10 de marzo de 2013

¿Se identifican?

¿Han tenido esos momentos melancólicos sin razón aparente?

Cuando, de repente, aunque estén bien una tristeza sin nombre los invade y no sabes de qué vivencia o recuerdo se está nutriendo. Pierdes motivación, energía, voluntad...

Todo se desvanece, se evapora y ni siquiera tienes ganas de preguntarte el por qué, o de tratar de luchar contra ello.

Quizá quieres música que acompañe esa... "soledad"...sensación? Pero ninguna letra parece adaptarse, son solo palabras en el aire sin ningún sentido; o la melodía misma parece ruido en la lejanía, te es tan ajeno... como si lo vieras todo indiferentemente a través de una bruma densa, como si tan solo fuera un paisaje lejano.

No queda absolutamente nada que hacer, ni mucho menos las ganas de mover un dedo para evitarlo o cambiarlo.

Ataca de pronto y muy efectivamente, solo quedan pensamientos vacios, carentes de emoción. No sabes por qué lamentar.

Algunas veces puede ser peor.

Algunas veces sientes un frio, un vacio en el pecho, que crece y tú eres consciente de su movimiento, como si fuera una mancha de tinta que se esparce por todo tu cuerpo. Es un vacio tan gélido, algunas veces he llegado a pensar que literalmente el viento puede llegar a soplar a través de ese agujero en tu pecho.

Tal vez lo hace, el viento sopla y entonces un grito sale de tu garganta. Un grito, un rugido... ¿Qué dice ese grito, qué comunica? ¿Desesperación, anhelo, llanto, tristeza, perdida, lamento? ¿¡QUE!?

¿Es esa la base de su horrible capacidad? ¿Es el secreto de las emociones fuertes? Que nunca sabes qué las genera. Como estar enamorado...

- Hey, estas feliz ¿Por qué?
- No lo sé, solo lo estoy- contestó con una sonrisa radiante en su rostro.

O como estar asustado, aterrorizado... precisamente porque la base del miedo es ser desconocido, por tanto más amenazador.

¿Es igual con...la tristeza o lo que sea que es esto?

Si te pasa como a mí, lo sabrás. Ya ni pones las manos, simplemente te dejas llevar. No hay nada que hacer con una fuerza tan terrible y discreta.

Puede durar solo un momento, llegar y desvanecerse, como una nube que tapara la luz de la luna y después se disolviera. O puede durar horas, días, semanas... cual tempestad.

Aguanta ahí, mi amigo. Nadie lo entiende, y aunque preguntaran, es difícil de explicar. No hay empatía posible en este escenario.

Aguanta... resiste, hazte un ovillo dentro de un rincón destrozado de tu mente, aférrate a ti mismo y esperemos que pase. Y así todas las veces que esa sensación regrese, resiste.

Si te sientes como yo, no estás solo.

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